domingo, 1 de diciembre de 2019

Fede se cruza con alguien especial en Rio de Janeiro

 —¿No vas a leerlo?


Federico tomó la hoja y leyó en voz alta: 

Se esconde el mar,
me besan las olas
ante el silencio de tu mirada.
Se ríe el sol cuando sueña la luna
detrás de los médanos.
Se encienden las nubes
al nombre de tu amor,
se aquietan las almas,
aunque las estrellas mezquinen sus luces.
Quedan pocas voces,
los momentos,
una última canción.
Me iré,
me voy,
nos fuimos




Cerró los ojos un instante, mientras la luna se perdía entre las nubes que el sol alumbraba. Una canción se esfumaba...


No hay comentarios:

Publicar un comentario